Durante el
pasado mes de enero tuve la ocasión de participar en I.E.S. Arrabal en un
programa de Educación Nutricional para el alumnado de las clases de 4º de
E.S.O. B, 1º Ciclo de Formación Profesional en Administración y Finanzas y 2º
de Bachillerato.
La
intervención tuvo una gran aceptación por parte del alumnado y el profesorado,
quienes colaboraron en la organización y gestión de las actividades
programadas.
El programa de
Educación Nutricional se organizó en 7 sesiones por clase, una sesión individual
en la que el alumnado cumplimentó una serie de cuestionarios sobre
conocimientos dietético-nutricionales, 5 sesiones de divulgación y una última
sesión en la que volvieron a cumplimentar los mimos cuestionarios.
Las sesiones
divulgativas recogieron información sobre metabolismo y composición corporal,
nutrientes y sus funciones en el organismo, grupos de alimentos y composición
nutricional, raciones y porciones de alimento y estructura y organización de
las comidas.
Pese a la gran
información disponible hoy en día sobre alimentación y dietética el alumnado
mostró un elevado desconocimiento de los tipos de nutrientes presentes en los
alimentos (carbohidratos, lípidos, proteínas, vitaminas y minerales) y su
función en el organismo (energética, reguladora y/o estructural). Además,
aunque conocen de forma general la composición nutricional de algunos
alimentos, la mayor parte del alumnado pensaba que los productos dietéticos
(light, desnatados, con fibra, etc.) son más saludables y nutritivos que sus
productos originales no dietéticos, desconociendo la calidad nutricional de
esos alimentos. Por otra parte, desconocían cómo organizar su alimentación de
forma equilibrada en el día a día.
Todo ello
demuestra que, pese a la elevada información disponible sobre alimentación y
dietética se requiere dedicar más tiempo y atención a la Educación Nutricional
de los jóvenes a fin de que consigan adquirir unos hábitos de alimentación
equilibrados.
El alumnado
valoró muy positivamente la actividad aunque les hubiera gustado que pudieran
ser actividades más prácticas en lugar de divulgativas. Además, el alumnado de
2º de bachillerato hubiera preferido que
el programa de Educación Nutricional hubiese sido organizado en otro curso para
no dejar de dedicarle tiempo a sus estudios para selectividad.
Por mi parte,
valoro muy positivamente la acogida de la actividad tanto por parte del
alumnado como por parte del profesorado y el resto del personal del centro.
Inmaculada Ruiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario